Descubre la historia de Saturnino Calleja en Albacete: El legado de un gran editor
¡Bienvenidos a Vive Albacete! En este blog podrás descubrir todo lo que esta maravillosa ciudad tiene para ofrecer. Desde sus hermosos parques y plazas, hasta su rica gastronomía y su historia fascinante. En esta ocasión, nos adentraremos en la vida y obra de uno de los personajes más importantes de Albacete: Saturnino Calleja.
Nacido en 1853 en el pequeño pueblo de Tarazona de la Mancha, Saturnino Calleja fue un destacado empresario y editor español. Sin embargo, su nombre está estrechamente ligado a la ciudad de Albacete, donde pasó gran parte de su vida y donde dejó un legado que aún perdura en la actualidad.
La llegada a Albacete
A la edad de 14 años, Calleja se trasladó a Albacete para trabajar en una imprenta. Desde entonces, se enamoró de la ciudad y decidió establecerse en ella para siempre. Comenzó a trabajar como aprendiz en la imprenta de Juan José Garrido, donde aprendió el oficio de la impresión y la encuadernación.
Con el paso de los años, Calleja se convirtió en un empresario exitoso y decidió establecer su propia imprenta en Albacete. Fue así como en 1881 fundó la Editorial Saturnino Calleja, que se convirtió en una de las más importantes de España en su época.
La Editorial Saturnino Calleja
La Editorial Saturnino Calleja fue una empresa pionera en la producción de literatura infantil en España. Sus libros, conocidos como «Cuentos de Calleja», se convirtieron en un éxito rotundo y fueron traducidos a varios idiomas. Estos cuentos eran ilustrados con hermosas y coloridas imágenes, lo que los hacía muy atractivos para los niños.
Además de los cuentos, la editorial también publicó libros de texto, enciclopedias y obras literarias de renombrados autores españoles. La calidad de sus publicaciones y su innovación en el mundo editorial, le valieron a Calleja el reconocimiento y la admiración de sus contemporáneos.
El legado de Saturnino Calleja
Además de su exitosa editorial, Calleja dejó su huella en la ciudad de Albacete de otras formas. Fue uno de los fundadores del Casino de Albacete, un importante centro cultural y social de la ciudad. También contribuyó en la construcción de la iglesia de San Pedro, donde hoy en día se encuentra su tumba.
Pero sin duda, uno de sus mayores legados es el emblemático reloj de la Plaza del Altozano, conocido como «El Reloj de Calleja». Este reloj fue un regalo de Calleja a la ciudad en 1923 y desde entonces ha sido un símbolo de Albacete y un punto de encuentro para sus habitantes.
Un hombre de negocios y filántropo
Saturnino Calleja no solo fue un empresario exitoso, sino también un hombre generoso y comprometido con su comunidad. Fue un gran benefactor de la ciudad de Albacete, donando parte de sus beneficios a obras de caridad y proyectos de mejora para la ciudad.
Además, Calleja fue un gran defensor de la educación y la cultura. Creía en la importancia de la lectura y el conocimiento, y por eso su editorial se enfocó en la publicación de libros educativos y literatura infantil.
Un recuerdo eterno
A pesar de que Saturnino Calleja falleció en 1915, su legado sigue vivo en la ciudad de Albacete. Sus libros y su reloj son recordatorios constantes de su importante contribución a la cultura y la sociedad de la ciudad. Además, la Editorial Saturnino Calleja sigue en funcionamiento en la actualidad, manteniendo viva la visión y el espíritu de su fundador.
En resumen, Saturnino Calleja fue un hombre visionario, emprendedor y filántropo que dejó una huella imborrable en la ciudad de Albacete. Su historia es solo una de las muchas que hacen de esta ciudad un lugar fascinante para visitar y vivir.
¡Esperamos que hayas disfrutado de este artículo sobre Saturnino Calleja y su relación con Albacete! Si tienes alguna pregunta o comentario, no dudes en dejarlo abajo. Y no te pierdas nuestros próximos artículos en Vive Albacete, donde seguiremos descubriendo los encantos de esta ciudad maravillosa. ¡Hasta la próxima!